domingo, 24 de enero de 2016

Educación emocional

Ya hemos comentado en algún sitio que hay un montón de cosas de nuestro cole que no se conocen del todo. Hoy vamos a hablar de uno de esos proyectos que nos convierten en especiales y que merecen el reconocimiento del equipo docente de nuestro Colegio: la educación emocional. ¿Y por qué? Pues porque actualmente el 80% de nuestros profesores está embebido en un proyecto innovador cuya finalidad es aprender y transmitir los interesantes conceptos que abarca la educación emocional. 

Vamos a ponernos un poco "finos": ¿qué es eso de la educación emocional?? ¿Y a mí como padre/madre de este cole, me interesa para algo?? Pues sí, mucho. Modestamente, podemos intentar dar una definición de lo que es la educación emocional: "el proceso por el cual, tanto niños como adultos, aplican de manera efectiva las actitudes necesarias para entender y manejar las emociones, lograr metas positivas, sentir y mostrar empatía por otros, y establecer y mantener relaciones positivas y decisiones responsables" (http://www.casel.org/social-and-emotional-learning/). Es decir, el aprendizaje que, de una forma más entendible, nos convierte en mejores personas y nos ayuda a hacer nuestra vida, y la de aquellos que nos rodean, más sencilla y feliz. Dicho así, desde luego que todos nos podríamos apuntar. Pero igual alguno de vosotros todavía se mantiene escéptico: "sí vale, a todos nos gustaría que la gente fuera más amable, que reconociéramos el esfuerzo de otros, que sean agradables con nosotros... pero la realidad es que ahí fuera la vida es dura y hay un mundo frío que no nos recibe así". ¿Estás seguro de que esa es la única conclusión? Pues vamos a intentar convencerte de que te equivocas.

La educación emocional se engloba dentro de un campo más complejo que es la "inteligencia emocional", una habilidad que podemos poseer de manera natural, o desarrollar convenientemente gracias a la educación, a ser posible, desde la más temprana edad. Y dentro de esto, se incluyen conceptos como el autocontrol (seguro que en algún momento te ha tocado un jefe que ha perdido los papeles por completo en una situación que no podía manejar), la empatía (cuánto más fácil es la vida cuando uno comprende, o hace comprender, de qué van sus problemas), la perseverancia (si alguna vez has sufrido una de esas situaciones deprimentes, en las que no ves un final, es fundamental tu capacidad de aguante y de continuar sin caer en el desánimo, esto también se aprende) o desde luego, la capacidad de motivarse a uno mismo (http://cmapspublic.ihmc.us/rid=1KD19ZCT2-2CGCPX2-1WXF/intel%20emocional%20Goleman.pdf). ¿Y esto tienen alguna utilidad, más allá de lo que parece? Pues la tiene: los últimos estudios en relación con la productividad de las empresas apuntan a que el modelo de trabajo piramidal, en la que hay una jerarquía férrea para todo que depende de la voluntad de un único jefe, va a ir cayendo, dejando paso a un modelo de trabajo en el que el empleado tenga cada vez más responsabilidad, y donde se valore su capacidad para empatizar con los demás y crear un ambiente de trabajo agradable y relajado que mejore la productividad y favorezca las famosas "tormentas de ideas" ("brainstorming"). Es decir, los últimos estudios indican una cosa muy obvia: estar relajado y tranquilo en tu trabajo hace que trabajes más y mejor, y por lo tanto, te hace también más interesante para una empresa, o para desarrollar tu propio trabajo. Pues idealmente, esto hay que intentar aprenderlo desde que somos pequeñitos.

Y hasta aquí más o menos lo que podemos explicar. ¿Que no te lo crees? Date una vuelta por la red buscando un poco más de información. Lo más probable es que el mundo vaya en esa dirección y un Colegio que aporta un equipo docente que está aplicando este tipo de conceptos desde luego merece nuestro apoyo y nuestro reconocimiento. Y además, ¡demuestra que #ElCorazónDelVicenteLateFuerte!

jueves, 21 de enero de 2016

Actividades extraescolares

Os dejamos un resumen actualizado de las actividades extraescolares organizadas por el AMPA con mucho esfuerzo, mucho cariño, y sobre todo, toda la educación emocional de la que somos capaces para gestionar correctamente la difícil organización. Se resume en dos fotos, pero hay un equipo estupendo detrás que permite que salgan adelante ; ), ¡gracias! 




¿Y a qué viene lo de la educación emocional?? Pues ya os lo contaremos...

jueves, 14 de enero de 2016

La educación no es solo cuestión de números

Vamos a empezar el año en nuestro blog con uno de los temas de la política nacional que más nos importan y que, en nuestra opinión, necesitan una visión e inversión económica diferente al que se ha venido impulsando en los últimos años: la educación. Y vamos además a hacer un intento de ser objetivos, imparciales y analíticos, de manera que podamos llegar a una conclusión lógica, sea cual sea el punto de vista de nuestro posible lector. 

Es indiscutible que, de manera general, en los últimos años de nuestra democracia la educación no está funcionando: tenemos una tasa de paro en los menores de 25 años que se mantiene en torno al 50%, no sólo una vergüenza, sino un drama nacional insostenible, que incluye además a los que denominamos "NiNi", jóvenes que ni estudian ni trabajan, y carecen por tanto de motivación alguna en sus vidas. Tenemos también el deshonroso mérito de ser el país europeo con mayor tasa de "NiNis". Sorprendentemente, seguimos sin ver un debate profundo que englobe todos los sectores implicados  en la educación que permita un análisis detallado del problema y una propuesta real y consensuada de modificación de nuestro sistema educativo. En su lugar, cuando vemos año tras año los recortes en educación, el argumento más esgrimido por nuestros gestores es "no nos cuadran los números", sentenciando con esta frase lapidaria todo posible debate.

Vamos por tanto a caer en un tópico, fijándonos en el mejor sistema educativo del mundo: el de Finlandia. Y vamos al mismo tiempo a extraer únicamente  dos datos objetivos, puesto que es fácil contestar que la realidad social, cultural, económica, demográfica, etc... de nuestro país y el de nuestro vecino nórdico son total y absolutamente diferentes. Nuestros dos datos objetivos son los siguientes:
- la reforma educativa finesa se llevó a cabo en los años 70 (http://www.oxydiane.net/IMG/pdf/Finland-Sahlberg.pdf). Ha tenido cambios posteriores, pero la esencia del sistema se forjó entonces y no han realizado reformas significativas hasta ahora, si bien están actualmente envueltos en un nuevo debate para su modificación. Tratemos de contar cuantas reformas educativas hemos sufrido desde la llegada de nuestra democracia, pero parece que son 7. Es posible que modificar las leyes educativas en función del color del gobierno correspondiente, cada pocos años, no sea del todo recomendable para nuestros futuros ciudadanos.
- la segunda cuestión es que la aprobación de dicho sistema educativo se realizó por CONSENSO. Para nuestros dirigentes políticos: según el diccionario de la RAE, consenso significa "Acuerdo producido por consentimiento entre todos los miembros de un grupo o entre varios grupos". La última reforma educativa es un claro ejemplo de lo que no significa consenso. ¿Es posible que en este aspecto también nos estemos equivocando? Condicionar todo el sistema educativo de un país a la voluntad de unos pocos tampoco parece lo más recomendable.

Nos permitimos por tanto pedir al Gobierno que hemos elegido entre todos y que en algún momento se materializará, que escuche al conjunto de la comunidad educativa, que estudie los problemas actuales y que tenga la entereza y profesionalidad suficiente como para otorgar a nuestro sistema educativo toda la importancia que tiene.  Nuestros datos demuestran que hay algo que no estamos haciendo bien.

Hasta aquí, creemos que un análisis objetivo. A partir de aquí, entramos en nuestra propia realidad, probablemente no compartida por todos. Somos un colegio público que ha sufrido la injusta e injustificada pérdida de una clase de 3 años en el presente curso con ese sempiterno argumento por parte de nuestra Consejería de Educación: "es que no nos cuadran los números", se sobreentiende que con los centros públicos, en ningún caso con los concertados-privados. Vamos a añadir un dato más: el sistema educativo finés es total y absolutamente público en más del 90%. Y público significa público, no concertado, ni sostenido con fondos públicos, ni regido por cualquier otro tipo de normas. Así que, en este aspecto, debemos dar la razón a nuestra Consejería, a nosotros tampoco nos cuadran los números. No nos cuadran los números de lo que destinamos a la educación pública y a la "pública", no nos cuadran los números del paro, no nos cuadran los deprimentes datos del informe PISA (¿cómo es posible que en nuestro colegio, teniendo buenos resultados académicos, se nos castigue con la eliminación de una clase??), no nos cuadran los números de la pérdida económica y social que supone despreciar la formación y experiencia de nuestro equipo docente y, sobre todo, no nos cuadra que un gestor, al que se presupone culto, formado, con experiencia y sobre todo preocupado hasta la médula por la educación de nuestr@s niñ@s, pueda cerrar todo debate o argumentación con una única frase: "no nos cuadran los números". Nos faltaría conocer con todo detalle de qué números hablan exactamente.

Pedimos por tanto justificadamente a la Consejería de Educación de nuestra Comunidad, que está haciendo hincapié en otra forma de gobernar, que nos escuche y devuelva nuestra clase. Desde luego, no somos nosotros los que tenemos la fuerza de imponer. Sin embargo, sí que creemos que en los años de Democracia que llevamos el país ha cambiado lo suficiente como para que sean los argumentos racionales y justificados los que deban primar y, en este aspecto, sí que podemos estar a la altura de Finlandia. ¿O no?